En el nombre de Dios , El Clemente, El Misreicordioso

Así es la penetrante naturaleza de violencia indistinta, que “terrorismo” es considerado como una de las primeras amenazas de paz y seguridad en nuestras sociedades.

La palabra terrorismo entró hace sólo unas décadas en uso amplio. Uno de los resultados infortunados de esta nueva terminología es que limita la definición de terrorismo a eso perpetrado por grupos pequeños o individuos. Terrorismo, de hecho, abarca el mundo entero, y se manifiesta en varias formas. Sus perpetradores no encajan ningún estereotipo. Aquéllos que no dan valor a las vidas humanas, y tienen el poder de hacerlas perder, aparecen en diferentes niveles en nuestras sociedades. El empleado frustrado que mata a sus colegas a sangre fría o el ciudadano oprimido de una tierra ocupada que da salida a su enojo explotando un autobús escolar, son terroristas que provocan nuestro enojo y reacción. Irónicamente sin embargo, el político que acostumbra animosidades étnicas antiguas entre las gentes para consolidar su posición, la cabeza de estado que pide “completo bombardeo” de ciudades enteras, los concilios exaltados que estrangulan millones de ciudadanos hasta la muerte manejando el arma insidiosa de sanciones, raramente es castigado por sus crímenes contra la humanidad.

Es esta definición estrecha de terrorismo que implica sólo individuos y grupos que han causado a los Musulmanes a ser asociados con actos de destrucción y terror, y como resultado, ellos mismos se han vuelto víctimas de violencia de odio y terror. iA veces se sostiene a la religión del Islam responsable de los actos de un manojo de musulmanes. y a menudo de los actos de no-musulmanes!

¿Podría ser posible que el Islam cuya luz acabó con las Épocas Oscuras en Europa, ahora proponga el advenimiento de una época de terror? ¿Podría una fe que tiene más de 1.2 billones de seguidores en el mundo, y más de 7 millones en América, realmente defienda la matanza y mutilación de personas inocentes? ¿Podría el Islam cuyo nombre significa “paz” y “la sumisión a Dios”, anime a sus seguidores a trabajar por la muerte y destrucción?

Por demasiado tiempo, nosotros hemos confiado en imágenes populares en los medios de comunicación y en películas Hollywoodenses, para las respuestas a estas preguntas pertinentes. Es, ahora tiempo para mirar las fuentes del Islam, y su historia para determinar si el Islam defiende la violencia de hecho.

La santidad de la vida humana

El Glorioso Corán dice: “… no quitéis la vida que Dios ha hecho sagrada, exceptuo por vía de la justicia y ley: así Él te ordena, Puede ser que razonéis.” [Al-Corán 6:151]

Islam considera que toda forma de vida es sagrada. Sin embargo, la santidad de la vida humana es otorgada un lugar especial. El primero y más básico derecho de un ser humano es el derecho de vivir. El Glorioso Corán dice: “…que quien mate a una persona la cual no es culpable de asesinato o corrupción sobre la tierra, se considera como si hubiese dado muerte a todo el género humano. Quien salve una vida, es como si salvara la vida a todo el género humano.” [Al-Corán 5:32]

Así es el valor de una sola vida humana, que el Corán iguala incluso el de tomar una vida humana injustamente, con matar a toda la humanidad. Así, el Corán prohíbe homicidio en términos claros. El tomar la vida de un delincuente por el estado para administrar justicia es exigido siguiendo las reglas de la ley, la paz y seguridad de la sociedad. Sólo una corte judicial apropiada y competente decide si un individuo ha comisado su derecho a la vida desatendiendo el derecho a la vida y paz de otros seres humanos.

Las Éticas de Guerra

Incluso en estado de guerra, el Islam manda que uno trate noblemente al enemigo en el campo de batalla. El Islam ha trazado una línea clara de distinción entre los combatientes y los no-combatientes del país enemigo. Con respecto a la población no combatiente está compuesta de las mujeres, niños, los ancianos y el débil, etc., las instrucciones del Profeta son como sigue: “No matar a cualquier persona anciana, cualquier niño o cualquier mujer” [1]. “no matar a los monjes en monasterios” o “no matar a las personas que están en lugares de culto”. [2] Durante una guerra, el Profeta vio el cadáver de una mujer tendido en la tierra y mencionó: “Ella no estaba luchando. ¿ Cómo entonces ella pudo ser matada”? Así se les garantiza a los no-combatientes la seguridad de vida aun cuando su estado está en guerra con un estado islámico.

Yihad

Mientras el Islam es mal interpretado en el mundo occidental, quizás ningún otro término islámico evoca tales reacciones fuertes como la palabra ‘Yihad’. El término ‘Yihad’ ha sido muy abusado, conjurando imágenes raras de musulmanes violentos, forzando a personas a someterse a punto de la espada. Este mito se perpetuó a lo argo de los siglos de desconfianza durante y después de las Cruzadas. Desgraciadamente, sobrevive hasta el momento.

La palabra Jihad viene de jahada su palabra de raíz que quiere decir esforzarse. Así que el jihad es literalmente un acto de esforzarse. El Profeta Muhammad (la paz esté con él) dijo que el jihad más grande es esforzarse con las sugerencias insidiosas del propio alma. Así el jihad se refiere principalmente al forcejeo interno de ser una persona de virtud y sumisión a Dios en todos los aspectos de vida.

Secundariamente, el jihad se refiere al esforzarse contra la injusticia. El Islam, como muchas otras religiones, permite la autodefensa armada, o retribución contra la tiranía, explotación, y opresión. Glorioso Corán dice: “¿Por qué no podéis combatir en el sendero de Dios y por la causa de los débiles, hombres y mujeres y niños? Que imploran “¡Señor nuestro! Sácanos de esta ciudad cuyos habitantes son injustos. Envíanos un defensor y envíanos quien nos socorra.” [Al-Corán 4: 75]

Así el Islam manda a sus creyentes esforzarse al máximo, purificándose, así como estableciendo paz y justicia en la sociedad. Un musulmán nunca puede estar tranquilo cuando esta viendo alrededor una injusticia y opresión.

Como Martin Luther King Hijo dijo: “Nosotros tendremos que arrepentirnos en esta generación no solamente por las palabras odiosas y acciones de las personas malas pero también por el silencio espantoso de las personas buenas.”

El Islam manda a todos los musulmanes a trabajar para mantener el equilibrio en el que Dios creó todo activamente. Sin embargo, sin importar cuan legítima la causa pueda ser, el Glorioso Corán nunca perdona la matanza de personas inocentes. El Aterrorizar a la población de ciudadanos nunca se le puede dar el término de jihad y nunca puede justificarse con las enseñanzas del Islam.

Historia de Tolerancia

Incluso los estudiosos Occidentales han repudiado el mito de los musulmanes que obliguen a otros para convertirse. El gran historiador De Lacy O’Leary escribió:

“La historia es clara, sin embargo, que la leyenda de musulmanes fanáticos, barriendo a través del mundo y forzando el Islam a punto de espada en las razas conquistadas es uno de los mas fantásticos mitos absurdos que historiadores han repetido alguna vez”. [3]

Los musulmanes gobernaron España durante alrededor de 800 años. Durante este tiempo, y hasta que ellos fueron forzados a irse, los no-musulmanes habían vivido y florecido. Adicionalmente, cristianos y las minorías judías han sobrevivido en las tierras musulmanas del Este Medio durante siglos. Países como Egipto, Marruecos, Palestina, Líbano, Siria, y Jordania todos tienen cristianos y poblaciones judías.

Esto no es sorprendente para un musulmán, pues su fe le prohíbe de obligar a otros a seguir su punto de vista. El Glorioso Corán dice: “La religión no se adopta por obligación. Es bien evidente la verdad del error. Quien abjure del culto del Taghut (ídolo) y crea en Dios se habrá asido a una columna inquebrantable. Y Dios es Oyente y Omnisciente.” [Al-Corán 2:256]

Islam – El Gran Unificador

Lejos de ser una dogma militante, Islam es un estilo de vida que transciende razas y etnicidad. El Glorioso Corán nos recuerda de nuestro origen común repetidamente:

“¡Oh, humanos! Os hemos creado a partir de un hombre [Adán] y una mujer [Eva], y [de su descendencia] os congregamos en pueblos y tribus para que os conozcáis unos a otros. En verdad, el más honrado de vosotros ante Allah es el más piadoso. Ciertamente Allah es Omnisciente y está bien informado de lo que hacéis. ” [Al-Corán 49:13]

Así, es la universalidad de sus enseñanzas que hacen al Islam la religión más rápida en crecer en el mundo. En un mundo lleno de conflictos y los cismas profundos entre los seres humanos, un mundo que es amenazado con terrorismo, perpetrado por individuos y estados, Islam es una almenara de luz que ofrece esperanza para el futuro.

(1) Narrado en la colección de traducciones de Abu Dawud.

(2) Narrado en el musnad de Imam Ibn Hanbal.

(3) Islam en la Encrucijada, Londres, 1923, página 8.